Nacido en los años 80, el concepto de « team building » o « construcción de un equipo » tiene como principal objetivo consolidar los lazos dentro de una empresa o grupo a través de actividades lúdicas. Estas últimas permiten a los empleados conocerse mejor mientras consolidan su motivación. Las actividades de team building tienen un impacto muy positivo ya que refuerzan el esfuerzo personal frente a los objetivos a alcanzar. Sirven así para la realización de una misión común. Al tener desafíos colectivos, los empleados o colaboradores de un mismo equipo aprenden a confiar entre sí en una situación fuera del contexto profesional. Se involucran personalmente y realizan esfuerzos al servicio del colectivo. En principio, las actividades de team building giran en torno a 3 grandes ejes:

• Los desafíos y los juegos

A través de desafíos y juegos, los equipos se desafían y destacan su espíritu de competencia. Algunos problemas aparecerán naturalmente.

• El compartir y la escucha

Cada miembro del grupo expresa sus puntos de vista respecto de los posibles bloqueos, sus dudas o incluso sus expectativas. El objetivo es discutir abiertamente y escuchar sin juzgar.

• Apertura

Una vez establecido el sentido de la escucha, es esencial sorprender al equipo para empujar a sus miembros a mirar y pensar de manera diferente. Aparte de la cohesión de grupo, las actividades propuestas deben permitir desarrollar la inteligencia colectiva. Siendo una palanca eficaz, el team building mejora la comunicación y desactiva los conflictos. También es durante un team building cuando se integran los nuevos colaboradores de la empresa.

¿Desea fortalecer su imagen de marca? Zoom en las 5 actividades ideales para impulsar la cohesión del equipo.

• Organizar competiciones para desafiar a su equipo

Las actividades deportivas son perfectas para fortalecer la motivación de un grupo. Carrera de sacos, competencia de baloncesto, combate de sumo, carrera de karting… la elección es amplia. Basta con ser original para encontrar las actividades que permitan resaltar el potencial de los empleados. Puede otorgar puntos por cada prueba y ofrecer recompensas a los mejores grupos. También es el momento ideal para presentar e integrar a los nuevos empleados en el equipo.

• Preparar un escape room

El escape room, de moda, es un juego mental donde los jugadores deben resolver acertijos para poder salir de una habitación. Esta actividad sirve para fortalecer la cohesión del grupo mediante el trabajo en equipo. También permite determinar los puntos fuertes de cada empleado: estrategia, lógica, reflexión…

• Hacer que vivan emociones fuertes

¿Su empresa está pasando por un período muy intenso? ¿Sus colaboradores están constantemente sometidos a presiones? Las actividades de emociones fuertes son las más adecuadas para gestionar este tipo de situaciones. Puede, por ejemplo, proponer una carrera de karting a sus colaboradores para enseñarles a manejar la presión. Mezclando el espíritu de competencia y una dosis de buen humor, este tipo de actividad permite crear una dinámica de grupo.

• Ofrecer un curso de música o de cocina

Combine lo útil con lo agradable haciendo que su equipo participe en un curso de música o de cocina. Además, estas actividades son una excelente manera de desarrollar la cohesión del equipo. Dado que cada colaborador se encuentra al mismo nivel, los cursos de música ayudan al equipo a evolucionar siguiendo un ritmo sincronizado. De hecho, todos se ponen al mismo tempo. En cuanto a las actividades culinarias, permiten desarrollar muchas cualidades en el equipo: gestión del estrés, determinación o creatividad.

• Impartir un curso de arte

No hay nada mejor que la pintura para impulsar la creatividad de un grupo. Puede elegir un tema sobre el cual los miembros del equipo deben realizar un mural artístico gigante. Así podrán expresar su espíritu creativo mientras participan en una obra común. Sepa que aprender una nueva habilidad también permite crear afinidades inesperadas. La ayuda mutua y la cohesión se desarrollan fácilmente ya que todos están inmersos al mismo tiempo en las mismas condiciones. Luego, exhiba su obra en la sala de descanso o en el pasillo de las oficinas para recordarles los valores de un equipo: creatividad, comunicación y buen humor.

En resumen, sepa que los viajes de incentivo ayudan tanto a la empresa como a los empleados. Al unir lo útil con lo lúdico, la empresa tiene todo que ganar. En cuanto a los colaboradores, salen fortalecidos. Además de la cohesión del equipo, estas actividades contribuyen a la satisfacción de los empleados y reducen el estrés. Para impulsar la solidaridad de su equipo, piense en organizar al menos dos sesiones de viajes de incentivo al año. Sin embargo, asegúrese de variar las actividades, cada una de las cuales tendrá un mensaje que transmitir: la colectividad, la competitividad, la escucha o la creatividad.

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