Empezamos con uno de los imprescindibles de los viajes en grupo o en solitario: Jemaa el Fna. Patrimonio de la UNESCO, alma palpitante de la ciudad marroquí, la plaza Jemaa el Fna es a Marrakech lo que las luciérnagas a la noche: resplandeciente de una loca alegría de vivir. Punto de encuentro culminante de las actuaciones folclóricas, adivinadores, cuentacuentos nocturnos, músicos gnaoua o acróbatas intrépidos… La plaza peatonal es tan conocida por sus actuaciones como por sus cafés y restaurantes.

2. Koutoubia, el legado arquitectónico

Icono arquitectónico y hermana gemela de la Giralda en Sevilla y de la Torre Hassan en Rabat, la Koutoubia es considerada una obra maestra arquitectónica de Marruecos. Construida durante 40 años, se erige alta y orgullosa en la ciudad más bella de África. Por la noche, su minarete de 77 metros ilumina la ciudad ocre en un radio de 25 km.

3. Ménara, el idilio atemporal

Desde hace 700 años, el estanque de la Ménara recibe el agua de las montañas para conducirla a lo largo de 30 km. Verdadero remanso de paz y serenidad, los jardines de la Ménara se presentan ante tus ojos como una ofrenda idílica, lejos de las preocupaciones de la vida. Fresco de otra época pintado sobre el telón de fondo del Alto Atlas, enmarcado por olivos que se iluminan al caer la noche.

4. Palacio de la Bahia, la supremacía de la belleza

Lugar emblemático del turismo y rincón de la ciudad cargado de historia, el Palacio de la Bahia es una visita obligada en la ciudad de Marrakech. Pequeña joya arquitectónica, este ahora museo de 8 hectáreas está lleno de un pasado antiguo inmortalizado en un estilo morisco, articulado alrededor de un gran patio interior tan majestuoso como monumental.

5. Jardín Majorelle… she’s like a rainbow

Famoso jardín botánico de casi 1 hectárea, el Jardín Majorelle es un lugar mágico donde se combina exotismo y autenticidad. Dentro de sus muros y vegetación, hay un museo bereber que recuerda la historia y cultura de Marrakech. Un lugar de ensueño bautizado con el nombre del grandísimo artista pintor Jacques Majorelle, quien, inspirado por los modelos de jardines islámicos, intentó plasmar este cuento visual en una villa Art Déco. ¡Y lo logró con creces!

6. Palacio El Badi, polvo de estrellas

Entiendan, palacio del incomparable. Y único, el Palacio El Badi lo es. Antiguamente considerado una de las maravillas del mundo musulmán con sus 300 estancias y su pintoresca arquitectura, hoy en día solo quedan ruinas rodeadas por un gran patio de olivos y naranjos. Este lugar mítico desprende un aura de historia y patrimonio. Tu viaje de incentivo a Marrakech no puede estar completo sin haber visitado este suntuoso palacio.

7. Museo Yves Saint Laurent, nueva ola

Nuevo en la lista de las 7 maravillas de Marrakech, y recién llegado a la lista de lugares imprescindibles para visitar en Marrakech. Sin embargo, el Museo Yves Saint Laurent no tiene nada que envidiar a los más bellos monumentos de Marrakech. Desde su inauguración en 2017, ganó el premio Design Awards 2018 de la revista británica internacional de diseño Wallpaper.

Un museo en torno al arte y la cultura, rodeado de un jardín paradisíaco, que se extiende por 400 m2, para el disfrute de los 700 000 visitantes anuales, ¡y el tuyo!